¿Qué es el aikido?

      El Aikido es un método de educación desarrollado como un arte marcial de origen japonés creado por  Morihei Ueshiba durante el siglo XX. El aikido es la interacción de técnicas marciales y principios filosóficos que le dan sentido a esa práctica marcial.

       Los kanjis o ideogramas con los cuales se escribe la palabra lo definen con bastante precisión: 

    Ai: Unión o armonía, lo que da sentido al “no choque” o bloqueo. A veces se confunde con el kanji “amor” el cual es otro , si bien fonéticamente es similar.

    Ki: En la actualidad este término se ha popularizado mucho más en occidente en el  último tiempo. Significa: Energía vital, chi para los Chinos, prana para los Hindúes,  Spíritus Vitae para los europeos renacentistas.

    Do: Camino como una actividad humana que se desarrolla con el devenir y la     

constancia sin un punto de llegada. En cuanto quien lo practique considere que ha  alcanzado el objetivo o ha llegado sale indefectiblemente del camino. 

                  ¿Porqué definimos el Aikido como u sistema educativo?

•  Un fragmento de una extensa entrevista realizada a Sensei Tissier por Guillaume Erard complementa acabadamente este concepto. 

Guillaume Erard: Ud. A menudo dice que el Aikido es un sistema educativo basado en una disciplina marcial. Según usted ¿qué desarrollarán las personas a través de la práctica de ésta disciplina?

 Christian Tissier: Bueno, eso es muy variable dependiendo de la persona, pero si hablamos de Aikido en términos del sistema educativo, no debemos olvidar el marco marcial. Este aspecto marcial ha de ser específicamente elegido. 

Podríamos haber elegido pintura, escultura, Zen y muchas otras cosas. Lo que algunas veces empuja a las personas a las artes marciales es un gusto por la confrontación o pelea. En una disciplina marcial, hay nociones intrínsecas de restricción y sanción.

Nuestro sistema de educación, cuyo objetivo es hacernos progresar como seres humanos, se basará en este contexto marcial. Cada error debe ser sancionado, ya sea por el profesor o por la imposibilidad de realizar la técnica, porque estamos sobre el tatami, tenemos una nueva oportunidad de empezar de nuevo. Debemos tomar ventaja de esta nueva oportunidad, para no repetir el mismo error, sino para continuar un movimiento en que el error particular es borrado. 

No estoy de acuerdo con la gente que dice que para progresar hay que hacerlo mejor. 

Para mí la progresión significa cometer menos y menos errores, perfeccionando nuestros movimientos y no presentar ninguna apertura. 

La esencia del Budo es la ausencia de aperturas, waki ga nai, que significa nunca dejar una abertura, ya sea a través de nuestras acciones o nuestras palabras. En uno de mis libros, copié la siguiente cita de una escuela de etiqueta llamada Ogasawara. En la puerta principal de la escuela está escrito: “Cuando uno está colocado en una posición ideal, incluso la persona más ruda no podrá molestarte”.

.
 Es nuestra conducta la que nos permite no dejar ninguna abertura. La educación marcial ofrece lo que yo llamo “Constantes de la Vía” que serán la actitud, el manejo de la distancia y la visión. Estas tres constantes trabajan juntas. No es muy difícil ponerlas en práctica, podemos decir ya que esto es un arte marcial, pero nada pasa todavía: no estamos en movimiento. Para poder entrar en movimiento debemos sumar otro principio natural, la técnica. 

¿Por qué es un principio natural? Porque desde el comienzo, la gente ha tratado de desarrollar técnicas con el fin de realizar las tareas más fácil y eficientemente. La noción de la técnica no puede prescindir de las nociones naturales. Esto es por lo tanto algo que se suma. Una técnica bien realizada crea una economía de movimiento y energía. El principio de economía es también natural. Esto es lo que debemos tratar de alcanzar.
Por sobre todo ello, puedes agregar principios como la comunicación, investigación de la pureza, etc. Realmente pienso que hay algunos principios del Aikido que todavía no han sido descubiertos pero que sin embargo son naturales y los debemos sumar a nuestro sistema educativo con el fin de enriquecerlo."

                                                                                     Christian Tissier

“Educar es creer en la perfectibilidad humana, en la capacidad innata de aprender y en el deseo de saber que la anima, en que hay cosas (símbolos, técnicas, valores, memorias, hechos…) que pueden ser sabidos y merecen serlo, en que los hombres podemos mejorarnos unos a otros por medio del conocimiento.”

                                                                                      Fernando Savater